Reseña
Los niños se hacen grandes. Hoy quieren atarse los zapatos sólitos, mañana querrán cocinar ellos mismos y puede que algún día quieran conocer el mundo ellos solos.
Pero aun queda mucho tiempo para que eso ocurra y a veces ser grande no es fácil. Por eso es bueno saber que nunca seremos demasiado grandes para los abrazos de mamá.